sábado, 8 de mayo de 2010

Al Calor de la Noche: Cuestiones de Orgullo.

Película: Al calor de la noche (In the Heat of the Night, EUA, 1967)

Director: Norman Jewison.
Actores: Sidney Poitier, Rod Steiger, Warren Oates, Lee Grant, Larry Gates.

Crítica: Es una impresionante película policiaca con un transfondo social de lo más interesante.
En el pueblo de Sparta, Misisipi el hombre más rico ha sido encontrado asesinado una noche muy calurosa. Los policías detienen a un hombre de raza negra llamado Virgil Tibbs (Sidney Poitier) sospechando por su color de piel y por estar en la estación de tren a altas horas de la madrugada. En la comandancia se enteran que Virgil no es un criminal, al contrario, es un policia experto en homicidios de Pensilvania. Sin mucho entusiasmo por parte del jefe Gillespie (Rod Steiger), a regañadientes de un superior suyo, Virgil deberá cooperar con el jefe Gillespie a encontrar al culpable de aquel crimen.
Norman Jewinson, en un muy buen guión de Stirling Silliphant basado en la novela de John Ball dirige una estupenda cinta de policías con una buena dosis de suspenso, una historia muy bien contada, un impresionante ritmo, en el que además se hace un análisis a la sociedad estadounidense, en el aspecto racista (que sigue latente solo que con otro color e idioma) y en lo ignorantes y orgullosos que son la mayoría de la población yanqui, tomado al personaje del jefe Gillespie como esa representación, y el de Virgil como todo lo contrario. Visualmente, Jewison igualmente crea un buen trabajo con escenas que para su época podrían resultar un tanto innovadoras.


Las actuaciones son impecables, salvo la de James Patterson que sobreactúa en varios momentos. Sidney Poitier, ademas de crear a un personaje muy interesante, lo plantea de excelente manera, al igual que Rod Steiger, que junto con Poitier crean una dupla muy interesante. El resto del cast crea una interpretación efectiva.
La dirección de fotografía de Haskell Wexler es muy buena, pues utiliza encuadres y movimientos de cámara que serían utilizados mayoritariamente a partir de los 70’s, además que el color y la iluminación utilizado para la cinta favorece a la narración, pues la mayoría transcurre en la noche.
La música de Quincy Jones nos adentra a la sociedad de finales de los 60’s, y complementa a la historia y los dilemas morales planteados en la cinta.
En conclusión una obra maestra del cine policiaco que recomiendo ampliamente y que hasta resulta más entretenida y agradable que muchas cintas del genero de la actualidad.

Calificación:

No hay comentarios: